Ángulos Muertos

 El 1 de octubre empecé a trabajar en una biblioteca

El 2 de octubre empecé a trabajar en este blog, diciendo algo así como que nunca había sentido tanto miedo como delante de un lago en Galicia...

Echo la vista atrás y me siendo estúpido, ridículo.

Miedo a un lago, que tontería más grande.

El 30 de junio vi a mi hijo perderse en un portal, y decirle adiós y sentir que no sabía muy bien cuando volvería a verlo.

Eso deja en nada el miedo a un charco de agua.

Lo intenté, de verdad completar el Ironman de As Pontes, de nuevo este año.

Hice cuanto pude, como un gorrión

pero no pudo ser.

Quién sabe si algún día lo vuelvo a intentar.

Yo no lo sé.

Sé que tengo miopía

y que estoy de paso.

Sé que de vuelta de Galicia vi águilas ratoneras sobrevolando campos de trigo.

Sé que los camiones avisan de que existen ángulos muertos

Sé que no siempre puede ser, que las palabras expresen exactamente el espíritu de una idea

y la idea es la siguiente:

tenía que ir

estar presente

en Galicia

para ver como mi hermano Juan llegaba feliz a meta

para ver como mi hermano Manolo llegaba feliz a meta

ese era mi papel, en esta historia

observar y aplaudir

no siempre puedes ser el héroe, está bien así

a veces sólo se trata de estar ahí y observar como otros lo hacen y aplaudir

con una reverencia la valentía de los demás

Me siento orgulloso de haberlo intentado

Me siento orgulloso de haber estado allí, en As Pontes, formando parte de algo que me superaba, que me ha superado siempre

No me avergüenzo. En absoluto.

He visto cuervos sobrevolando paquetes de heno

he visto camiones cargados de ángulos muertos

he visto tantas cosas, me siento tan orgulloso de mis ojos miopes!

He estado allí, viéndolo todo. Participando y aplaudiendo y agradeciendo.

He estado allí

ayudando a que otros llegaran dónde yo no podía llegar...

Pero ahora debo marcharme.

He dado un paseo por mi pueblo hoy.

Un pueblo humilde.

Tal vez haya vivido una vida que no era la mía, hasta ahora

y haya intentado retos que no eran los míos

pero he estado allí

tan cierto como que ahora estoy aquí

chafando teclas de un ordenador prestado

en la casa de mi madre

Está bien así

todo está bien

Es bueno ganar, a veces

y es bueno perder, a veces

y siempre necesario intentarlo

y siempre importante agradecerlo

y conservar como un tesoro

la voluntad de avanzar

de preguntarse que hay detrás de la línea del horizonte

de caminar

hacia esa pregunta

y de aceptar

el hecho de que a veces hay una respuesta 

y a veces

no la hay.