Grande Argentina
Como si lo estuviera viendo ahora
mi abuelo, sentado delante del televisor
mientras emitían el <<Quién sabe dónde>>
y diciendo
ojalá este programa hubiera existido cuándo lo de mi hermano
Lo de su hermano
era que cuando empezó la guerra civil se largó
a la Argentina
y mi abuelo se quedó en Alcantarilla
a luchar contra el compinche de Hitler
pero que nunca pegó un tiro a nadie
ni a él, obviamente, tampoco se lo pegaron
Pues tardaron treinta años en reencontrarse
y fue de pura chiripa
uno del pueblo se fue de vacaciones a las américas
y se lo encontró
así, sin más
y al volver se lo contó a mi abuelo
y si hubiera existido el <<Quién sabe dónde>>
en lugar de treinta hubieran sido quince, o diez años...
se organizó una gran fiesta en el patio de los abuelos
se encontraron una vez
y ya no volvieron a verse más
la familia reunida
es más peligrosa que el fuego de artillería
la mujer de mi tío-abuelo era rubia y llevaba vestidos de muchos colores
y se pintaba los labios y los ojos
y era divertida y bailaba y cantaba
de eso casi me acuerdo
y mi abuela no era así
por su puesto que no
la guerra, las necesidades, las penurias
ella no podía permitirse ser así
como si en Argentina no supieran lo que es el hambre y la guerra
como si esas cosas sólo pasaran en nuestro pueblo
Yo era un crío
no tengo recuerdos, sólo los relatos de los demás
a través de los cuáles he creado el mío propio
lo que sí recuerdo es que años después
un primo de mi padre
vino a España
y hubo otra fiesta
y sacó una guitarra de su funda y nos cantó sus canciones
y a los melocotones los llamaba duraznos
y a las tres de la mañana
nos fuimos a dormir
con dolor de oídos y de culo de estar sentados en aquellos bancos de piedra
alegres de todo lo que había sucedido
alegres de que, al fin, hubiera terminado.
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